En las empresas, se utiliza como herramienta fundamental en procesos de gestión.
Identifica a las personas y las distingue por medio de tipos comportamentales. El resultado de este análisis, es un detalle de rasgos comportamentales distintos que determina la tendencia de acción de las personas y explica los motivos que las conducen a actuar de la forma como actúan.
Identifica talentos por distinción de aptitudes y posiciona a los profesionales del modo más alineado a las funciones, según las habilidades requeridas en los cargos.
Soluciona problemas estructurales en sectores de la empresa determinando posiciones y compensaciones – “Proyecto de Ingeniería Humana”.
Proporciona un análisis robusto sobre las habilidades individuales, la adhesión de estas habilidades a los cargos e identifica oportunidades de desarrollo, entrenamiento, esfuerzo y análisis de desempeño.
Determina y orienta trayectorias y caminos de la carrera, facilitando el desarrollo de Recursos Humanos.
Individualmente, las personas utilizan esta herramienta para el conocimiento de sí mismos, para perfeccionar relaciones y planificar su trayectoria profesional (tendencia o inclinación natural para alguna profesión).